“La Psicología de la investigación criminal” fue el nombre de la clase magistral dictada por el académico de la Universidad de Barcelona, experto en Psicología Jurídica, Criminal y Criminología Avanzada, frente a los estudiantes del programa. Las diversas perspectivas científicas en el estudio de la criminalidad, sus teorías y marcos explicativos, y los ámbitos de aplicación de estas técnicas, fueron parte de los temas que abordó en su visita.

Promover espacios de intercambio de experiencias con otros países, y favorecer la continua actualización en la formación académica y profesional, fue uno de los objetivos que se propuso para este año el ‘Diplomado en Psicología Jurídica, Especialización en Evaluación Psicológica Forense’. Aspiración que permitió a los estudiantes del programa contar con la participación de Miguel Ángel Soria, uno de los expertos más importantes a nivel internacional en Psicología Criminal.

En su visita a nuestro país, el académico de la Universidad de Barcelona, que dirige el Máster de ‘Perfilación y Análisis de Conducta Criminal’ y el de ‘Psicología Jurídica y Forense’ en dicha casa de estudio, dialogó con los estudiantes del diplomado y abordó las diversas perspectivas científicas del estudio de la criminalidad, sus teorías, marcos explicativos y los ámbitos de aplicación de estas técnicas.

El profesional, que a lo largo de su carrera ha colaborado con las principales policías del mundo, puso énfasis en que si se quiere trabajar en el ámbito forense, es necesario conocer las otras ciencias afines. “Es importante que entiendan que la psicología es una ciencia que analiza el comportamiento, y que no se basa exclusivamente en dominar unos test. La conducta tiene sus explicaciones y sus formas, sobre todo cuando van asociadas a la criminalidad, que es el ámbito específico”.

En su visita al país, el destacado profesor dijo que en Chile, al igual como ocurre en España, uno de los grandes desafíos para avanzar en esta materia es lograr un trabajo en conjunto entre la policía y el mundo académico. “Cuesta mucho que el ámbito del derecho, o el policial, entienda que pueden existir medios y técnicas externas a la propia estructura de la organización, que favorezcan la operatividad y la comprensión de los casos”. Y si bien dijo que entiende el recelo con que estas instituciones trabajan, ya que “la responsabilidad social que se les atribuye también es tremenda”, es necesario desarrollar estrategias para que esa realidad comience a cambiar.

“Nosotros tenemos que trabajar para ganarnos la confianza. Tenemos que demostrar que somos operativos y que las herramientas que entregamos sirven de algo. La verdad es que hasta ahora no han visto nada… Sólo tesis doctorales, que es conocimiento que se mueve en los márgenes de la academia. A la hora de mejorar las condiciones de los interrogatorios o el análisis de los testimonios… no hemos hecho nada concreto. Por eso tenemos que implicarnos y dialogar”, comentó el profesional, que visitó el Diplomado en un esfuerzo de sus autoridades por seguir ampliando los conocimientos de la disciplina a nivel nacional.

De acuerdo a Enrique Chía, Jefe del Programa que este año cumplió catorce años de vida, el área de lo forense sigue estando en una etapa bastante inicial en Chile, por lo que contar con un invitado de esta categoría, sin duda, es un aporte fundamental para los profesionales que están en formación. “Nuestro objetivo es seguir desarrollando esta disciplina. Y, en ese sentido, tener la posibilidad de dialogar con un especialista, que ha trabajado con las mejores policías a nivel mundial, evidentemente es de gran ayuda. Para nosotros es todo un orgullo contar con la presencia de Miguel”, afirmó.