En una ceremonia en Casa Central, Marianne Spuhr, Esteban González, e Isabella Silva, recibieron el reconocimiento de la Universidad y de las máximas autoridades deportivas del país. Un merecido agradecimiento a los estudiantes EPUC, y a los 17 atletas que representaron a la UC en diversas competencias internacionales. “Es emocionante y nos llena de orgullo y alegría conocer el esfuerzo y ejemplo diario que dan a nuestra comunidad universitaria”, dijo el Rector.
Este año, más de cien torneos internacionales han contado con la presencia de deportistas de la Universidad Católica. Estudiantes que no solo han dejado en alto el nombre de nuestra institución, también han defendido la bandera chilena en diversas competencias alrededor del mundo. Por eso, con un desayuno en Casa Central, se quiso reconocer a estos jóvenes que con esfuerzo y perseverancia, han destacado a nivel deportivo.
En total, fueron 17 los estudiantes que recibieron el agradecimiento de parte del Rector Ignacio Sánchez, y de las máximas autoridades del deporte nacional. “Es muy emocionante conocer el ejemplo diario que dan a nuestros profesores y estudiantes. Quisiéramos tener más y más estudiantes representando a la Universidad y al país”, dijo a quienes participaron en los Panamericanos , en los Para-panamericanos, en las Universiadas, y en el Panamericano Universitario FISU de Básquetbol 3×3.
Por su parte, el Presidente del Comité Olímpico de Chile, Miguel Ángel Mujica, quiso resaltar que el éxito deportivo va más allá de los podios. “No solo es importante ganar medallas. Los valores olímpicos involucran muchas cosas más que la competencia. Respeto, disciplina, perseverancia, son aspectos que hay que cultivar. Por eso, destaco a la UC que no solo trata de obtener éxitos deportivos, también de formar personas con valores”. Opinión que compartió el Subsecretario de Deportes, Andrés Otero Klein, quien también destacó el desafío que enfrentan los jóvenes al compatibilizar su carrera deportiva con las exigencias académicas. “Todos ustedes son inspiración, son el ejemplo de que sí se puede. De que hay que romper el paradigma de que la Universidad es la tumba de los deportistas”.
Desafíos Internacionales
Esfuerzo, perseverancia y amor por el deporte, son palabras que bien representan a Marianne Spuhr, Esteban González, e Isabella Silva. Los tres deportistas homenajeados en Casa Central por su destacada participación en competencias internacionales. Entre ellas, las 30° Universiadas de Verano, la máxima cita del deporte universitario que se desarrolló entre el 3 y el 4 de julio en Napolés.
Con más de 119 países, compitiendo en 18 disciplinas, Chile contó con una delegación de 73 deportistas. Dos de ellos eran Marianne Spuhr y Esteban González. Estudiantes de la EPUC que defendieron la bandera chilena en natación y atletismo en Italia. “Fue una experiencia increíble. Yo ya había ido a Taipei (Olimpiadas anteriores), y son experiencias que quedan para toda la vida. Si bien, por un tema de salud, no pude obtener los resultados que esperaba, es sumamente enriquecedor participar de una instancia de este tipo. Conocer otros países, otras cultura, otros deportes, te hace crecer como deportista y como persona”, dijo la joven que formó parte de la delegación de la UC, y que hace poco se tituló como psicóloga.
Un aprendizaje que también fue valorado por Esteban González, estudiante de tercer año de psicología, que participó por primera vez en el encuentro. “Me di cuenta que como país, incluso como continente, estamos muy atrasados. Instancias como éstas sirven para conocer distintas realidades. Un aprendizaje que al final inspira y motiva a ser un agente de cambio”.
Pese a que él veía lejana la idea de participar en las Olimpiadas Universitarias, quien es capitán de la selección de atletismo logró alcanzar la marca necesaria para transformarse en uno de los 75 chilenos presentes en la cita deportiva. “Si bien quedé eliminado en fase de grupo, siento que fue una buena participación para lo que venía haciendo. Originalmente no estaba en mis planes ir a las Olimpiadas. Entre muy justo, cortando la marca mínima, pero al final se dio, y me preparé para dar lo mejor. Creo que esa es la ‘espinita’ para el 2021. Lo que me motiva a seguir entrenando estos dos años”.
En el caso de Isabella Silva, el gran desafío deportivo de este 2019 fue el Panamericano Universitario FISU de Básquetbol 3×3 desarrollado en Maceió, Brasil. Vistiendo la camiseta de la UC, la joven participó del encuentro que contó con la participación de 13 equipos provenientes de 7 países. “Es bonito compartir con nuevas culturas y con personas que disfrutan de tu misma pasión. En países como Brasil, la gente cultiva mucho más el deporte, y fue realmente una fiesta”, señaló.
Doble mérito
No solo talento, sino que la capacidad de reinventarse y superar obstáculos, es lo que hace especial a un deportista. Una receta que conocen bien Marianne, Esteban, e Isabella; quienes han tenido que encontrar la fórmula para compatibilizar sus carreras deportivas con sus estudios. Tarea compleja, pero que han sabido sortear con éxito, gracias al esfuerzo y al apoyo de la familia y amigos.
“Con compromiso y pasión las cosas se pueden lograr. Es necesario tener determinación y convicción respecto a lo que uno hace. Es cierto que a veces el precio de seguir los sueños es alto, pero la recompensa de hacer lo que a uno le gusta, es impagable”, dice Esteban. Opinión que comparte Marianne, quien destaca la organización como otro de los factores claves. “Uno tiene que ser capaz de ordenar sus tiempos y ser responsable. Ésas son características que sirven no sólo para ser exitoso en lo deportivo, también sirven para la vida”.
Por otro lado, la familia y los amigos también han sido esenciales en el camino que escogieron para sus vidas. “Muchas veces bajamos la cabeza porque nos va mal en una competencia, y quienes te ayudan a salir de ese bajón son los amigos, los compañeros, la familia… Ellos son parte fundamental para no dejarse abatir”, afirmó Isabella.
Finalmente los profesores también han aportado su granito de arena. “Siempre entendían que también tenía que cumplir con el deporte. En ese sentido, eran bien comprensivos. Tenían harta voluntad y flexibilidad con nosotros”, dijo Marianne. Un comprensión que le gustaría que fuera más institucionalizado a nivel de Universidad, «para que no sólo dependa de la buena voluntad de los profesores”. Algo que, a juicio de Esteban, podría lograrse masificando la práctica del deporte. “En el caso de la Escuela, no hay una cultura deportiva entre los estudiantes. Y eso se nota, por ejemplo, en las competencias a nivel interno, en que tenemos muy poca presencia de deportistas de psicología. Entonces hay que trabajar en eso, porque el deporte tiene una serie de beneficios asociados. Uno de ellos es el de la salud mental”, afirmó.
Texto: Andrea Fuentes U.